¿Secuestrar o ser secuestrado?

Una de las cosas que más me alucinan de la vida, es que te sorprende cuando y como quiere. No importa cuan planeado tengas un día, que sin tu poder hacer nada, todo puede darse la vuelta. Para bien o para mal. Es por eso que aunque ya suene banal, hablar de vivir el ahora, es la mayor realidad que pueda existir.

Pero no voy a hablaros hoy de eso. Demasiado místico para un lunes por la mañana, para la mayoría quizás.

Voy a relataros, algo que me pasó el otro día, en un lugar muy frecuentado por mi, con mi hermana.


Estábamos tranquilamente tomando unos refrigerios en la terraza de un bar cercano a nuestra casa (aprovechando el tiempazo que está haciendo), cuando se nos acercó un "joven" con la inquietante pregunta : ¿Qué preferís, secuestrar o ser secuestrado? De primeras, yo me asusté bastante... pero según fluía su monólogo, fui tranquilizándome.

Dijo muchas cosas, demasiadas que no entendí, pero me marcó una mucho, me pareció brutal y tenía que compartirla.

Seguramente es chico no hable mucho por ahí, y cuando lo hace, posiblemente no le den demasiada coba, pero con mi hermana... eso es imposible.

El caso es que nunca sabes cuando un desconocido, que a priori no podría apostarte nada, puede dejarte una frase bien marcada, y sobre la que acabarás dándole vueltas varios días después. Y esta es:

"Descubre lo que te llama y sabrás de donde vienes, donde estás y a donde vas".

Ahí lo dejo...

Esto es todo por hoy. No olvides que cada persona cuenta, no importa de donde venga o como sea, puede darte una gran lección.

¡¡FELIZ LUNESS!!

   Cris

 Pd: Las fotos que normalmente uso para encabezar las entradas personales son de páginas de libre  uso. En este caso de https://unsplash.com/.

    Un besito